Investigadores del Instituto de investigaciones Agropecuarias del INIA presentaron sus trabajos ante productores, técnicos y empresas agrícolas, en el marco del Seminario de Hortaliza organizado por la municipalidad de Maule
Ante 160 productores de Maule, especialistas del Instituto de Investigaciones Agropecuarias (INIA), vinculadas al Centro Tecnológico de Control Biológico de INIA Quilamapu (Chillán), presentaron los trabajos de investigación en hongos microscópicos que desde el interior de las plantas estimulan el crecimiento de éstas y combaten plagas y enfermedades que las afectan
Durante la charla, enmarcada dentro del Seminario de Hortalizas organizado por la municipalidad de Maule, a la que asistieron productores, asesores técnicos y empresas agrícolas, las investigadores del CTCB del INIA Quilamapu expusieron sus conclusiones con el objetivo de promover el uso del control biológico en los sistemas productivos agrícolas de la Región de Maule.
Las expertas mostraron el uso benéfico de microorganismos específicos como los endófitos, que son hongos microscópicos que viven al interior de las plantas y las estimulan en el crecimiento o las defienden de enfermedades.
Durante la primera charla, la investigadora Lorena Barra se refirió a la importancia de usar microorganismos en la agricultura como controladores biológicos de plagas y enfermedades. “Los agricultores de Maule tienen una producción intensiva de hortalizas y durante muchos años han realizado un manejo fitosanitario convencional con un alto uso de productos químicos, por lo que es muy conveniente que conozcan otras alternativas de control que son más sustentables, limpias e inocuas”, destacó la investigadora.
En su presentación hizo énfasis en el uso de hongos como Beauveria, Metarhizium y Paecilomyces, tradicionalmente utilizados para el control de plagas agrícolas, pero que actualmente han sido estudiados por su acción como endófitos, es decir que actúan desde el interior de las plantas, no sólo en el control de insectos dañinos, sino que también en el control de enfermedades y en la promoción de crecimiento.
Posteriormente, la fitopatóloga Paz Millas mostró las distintas enfermedades que afectan a las hortalizas, tras lo cual entregó alternativas de control integrado de las mismas, haciendo énfasis en control de enfermedades mediante el uso de los hongos Trichoderma y Clonostachys. Destacó que estos hongos pueden ser usado a favor de los productores ya que colonizan el interior de las plantas (actúan como endófitos), protegiéndola frente al ataque de otras enfermedades.
Al término de las presentaciones que concitaron gran interés entre los asistentes, integrantes del grupo de investigación de hongos endófitos de INIA Quilamapu montaron estands con los resultados que se han obtenidos hasta la fecha en el proyecto “Hongos endófitos para el control de plaga y enfermedades”. Se trata de un proyecto de investigación que cuenta con el financiamiento del Fondo de Innovación para la Competitividad (FIC Región del Maule) que en un año de trabajo ya se ha logrado identificar y seleccionar 10 cepas de hongos endófitos.
En la actualidad las investigadoras realizan evaluaciones tendientes a masificar estos microorganismos y emplearlos en beneficio de los agricultores.
Cabe señalar que estos hongos endófitos son inofensivos para el ser humano, animales y plantas, teniendo un uso específico sólo como controladores de plagas, enfermedades y promotores de crecimiento de especies vegetales.
El Centro Tecnológico de Control Biológico de INIA Quilamapu, a pesar de tener su sede en Chillán, está ampliando su cobertura a predios agrícolas de la Región del Maule, donde se ejecutan varios proyectos de investigación con el solo objetivo de promover el uso de esta tecnología limpia y así disminuir el uso de agroquímicos en la agricultura regional.